¿Cómo soltar, abandonar, dejar ir, en el proceso de Perdón?

Estas preguntas provienen de una parte de la mente que no quiere soltar, abandonar o dejar ir. Surgen porque el ego no desea hacerlo.

En realidad nosotros no soltamos, ni abandonamos, ni dejamos ir, sino que admitimos el “no sé”, pidiendo ayuda y diciendo “quiero ver esto de otra manera”.

No sé, pero me paro y dejo que se me muestre, sin ninguna expectativa, sin intelectualizar, justificar o querer tener razón. Me quedo en silencio, en Paz, y dejo ir las creencias erróneas que mi mente alberga, en manos del que sabe quien soy realmente. Pongo mi atención en mi acción inocente, libre de miedo y culpa, y hago lo que me toca sin juicio ni control.

El Perdón tiene que haberse producido en la mente que no controla, para que ese espacio de Inocencia y sanación permita, más adelante, el futuro Perdón en situaciones nuevas; para poder darnos cuenta con más facilidad de dónde está el personaje y cómo soltarlo.

Al principio, cuando no tenemos práctica de Perdón, nos frenamos creyendo que no podemos perdonar y que las cosas no cambian. Y es cierto, puede que no cambien. Entonces nos identificamos de tal manera que adoramos e idealizamos la situación y al personaje, olvidándonos de quiénes somos.

Quién elige no somos nosotros solos. A todas las personas que nos planteamos cómo soltar, la respuesta es: No queramos hacerlo solos, invitemos al Espíritu, pensemos con la mente correcta  y que nos dé igual todo lo que ocurra.

Démonos cuenta de que todo esto es un juego de liberar culpa inconsciente. Salgamos de la película y pongámonos cómodos en nuestro asiento de espectador.

 

* Para conocer más sobre el proceso de Perdón, puedes unirte a nuestras formaciones, en las que trabajamos profundamente este proceso a nivel mental y físico.

* También puedes ver más sobre el Perdón en este vídeo de Teresa.