Pongo mi futuro en manos de Dios

 

¿De dónde crees que viene tu estrés, caos, inseguridades, sufrimiento, enfermedad, escasez, vacío, tu no merecimiento y todo lo que crees necesitar sino de creerte que eres tú tu propio creador, y que todo depende de ti?

Hoy se te da la clave para salir de este engaño: acabar con el tiempo convirtiendo tu pasado, presente y futuro en un instante santo todo abarcador, donde todo queda resuelto en tu mente en paz, entregada sin excepción a su Creador, a la Verdad, con la total confianza y desapego de un mundo, que para ella ya no tiene ningún valor en sí mismo, ni otro sentido que el de ser un lugar donde elegir de nuevo cada instante el Amor y la Verdad que somos, poniendo toda nuestra existencia  en manos de esta Verdad.

¡Que fácil es lo único que tenemos que hacer y que complicado nos lo ponemos!

Pon tu futuro y tus pensamientos en manos de Dios. Permítete ser salvado, ayudado, liberado… No le eches la culpa al mundo ni a tus circunstancias de tu frustración, eres tú y solo tú, quien deseas estar ahí. ¿Hasta cuándo?

Pongo mi futuro en manos de Dios. Soy merecedor del Amor de Cristo, me permito ser amado, guiado y cuidado, sabiendo que todo es para mi bien.