Cómo despertar del sueño

¿Cómo despertar del sueño?

Despertar es posible cuando ejercemos nuestra libertad de cambiar de mentalidad, y al hacerlo, todos nuestros pensamientos cambian también.

Liberar al mundo de todo lo que pensé que era es liberarme de todo  lo que pienso que soy, es salir de este juego ilusorio de sueño,  separación,  creencias falsas sobre mí, desigualdad. . .

Esta idea nos lleva a reconocer que podemos elegir de nuevo, que hemos inventado un mundo que alimenta cada una de esas creencias y cada uno de los personajes a los que devaluar: la creencia en la debilidad,  el papel de salvador de otros o de víctima, el controlador, la creencia en el no merecimiento y la escasez. Hoy libero al mundo de todo eso porque ya  estoy cansado/a de vivir este sueño de separación, porque he elegido cuál es mi función, porque reconozco que mi Fuente está conmigo y que soy tal como Dios me creó. Todo lo que nos acontece  está ahí para ser liberado, todo está para ser vivido, todo está para ser unificado en un solo criterio de Amor Incondicional e inocencia compartida.

El poder de las creencias es totalmente poderoso. Escucha la voz que te dice qué creencias son verdad en ti. Deshaz con el Perdón toda la mentira que hay en tu mente acerca de ti y del mundo. Deja de actuar como un loco dándole realidad a la mentira del mundo y a creerte que eres víctima de los pensamientos y de los efectos de ese mundo. Pon en tela de juicio todo lo que vives, todo lo que piensas, todo lo que crees ser hasta ahora. La salvación está aquí, no te tienes que ir a otro lugar, no tienes que huir de nada ni de nadie. La salvación se manifiesta cuando tú cambias de mentalidad acerca de ti, pues tus pensamientos acerca del mundo cambiarán también. En este instante ya no hay pasado doloroso ni rencoroso ni hay un futuro inestable. Sólo hay un elegir de nuevo desde la experiencia de lo que no me sirve para que, aquí y ahora en este único Instante Santo presente, pueda liberarme de lo que no quiero, aquí es el único sitio donde se produce el Perdón, aquí y ahora donde elijo lo que no soy.

El cambio de percepción y el perdón que propone Un Curso de Milagros nos llevan a ser radicales: el mundo no me ofrece nada que yo desee. No intentes justificar nada de lo que hagas en el mundo otorgándole  un fin último, ya sea espiritual o de mejora, si con ello estás  dándole realidad al dolor y la aflicción… No puedo salvar al mundo reconociendo el error en él. La única forma de sanar al mundo, de sanarme a mí, es reconociendo que no hay error, que no hay culpa, que no hay miedo, que no hay dolor que me impida estar en paz.

Acepta y ríndete a aceptar que quieres la paz, la libertad, la plenitud y el mundo cambiará a la par porque ninguna idea abandona su Fuente, ninguna idea que tengas acerca de ti o del mundo abandona la auténtica realidad de lo que eres. Si piensas que no eres válido y que eres digno de culpa y de castigo por tu invalidez eso es lo que vas a vivir en el mundo, el mundo va a reflejar la Fuente que diseñó tus ideas.

Reconoce que también están ahí tus ideas de amor, de inocencia, de capacidad, de abundancia para generar un mundo que refleje esa abundancia. Y da igual que el mundo no quiera aceptar esto, no todo el mundo está preparado para aceptarlo, pero tú irás tan lejos como te propongas ir. Acéptalo para ti y muéstrale este cambio al mundo.  También habrá un cambio en la mente de tus hermanos cuando cambie tu percepción acerca de ti y de ellos.

Esto es curar. Esto es la salvación. Sanar es hacer Uno, sanar es hacer íntegro, sanar es cambiar todas las ideas de culpa, de pecado, de dolor, de insuficiencia acerca de ti y del mundo, es acabar con la separación. No hay dos, no hay cuerpos separados, no hay enfermedades… hay sólo una Fuente, hay sólo Amor Incondicional, hay sólo inocencia, capacidad y abundancia esperando a ser reconocida.

Y tú ¿quieres romper tus cadenas despertando  a la Verdad?.