Sí a la Vida. Mensaje de Resurrección

Jesús, al resucitar, dijo Sí a la Vida. 

 

Sí a dejar la muerte atrás y con ella la realidad de que somos un cuerpo con sus manifestaciones erróneas: el dolor, el sacrificio, la enfermedad, la no valoración, el miedo, la incapacidad. 

Ya no hay culpa, ya hemos elegido por la Inocencia y reinterpretado nuestra vida. 

 

Hay muchas claves en esta información que el Padre nos regala. Vivámosla, diciendo Sí cuando nos pidan Amor, cuando dudemos sobre llevar algo a cabo, cuando comencemos cualquier relación o proyecto. 

 

Sí a la libertad, la generosidad, la comprensión y la comunicación verdadera desde el Ser. 

Sí a ver más allá de lo que aparenta ser el mundo que nos rodea. 

Sí a ver a Dios en todo: personas, lugares, animales, situaciones. 

Sí a vernos en Dios continuamente y vivir una vida en plenitud. 

 

Decir Sí a la Vida es ser feliz con lo que haya, reconociéndonos en el divino poder que nos lleva a ser Uno. 

 

Hoy es el día de la vida. El día de dejar atrás y  dejar de hacer todo lo que hemos venido haciendo para proteger el cuerpo y sus identidades. 

 

La Resurrección es el símbolo de la liberación de la culpa y el miedo por medio del reconocimiento de nuestra Inocencia. 
Vive, pues, con Inocencia. Dí Sí y resplandece.

 

Aprovecha mis imágenes para recordarme con Inocencia, más allá de ese cuerpo, dolorido en apariencia, y las formas que me acompañan. No te quedes ahí, por emotivo que sea, pues la culpa y el miedo te abatirán de nuevo.

 

Que mi paso por tu vida evoque sólo Amor,  pues eso es lo que eres. 
Libérate junto conmigo. Resucita conmigo. Eres tan Inocente como yo.

 

 

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