Recuérdame con Inocencia

Estos días, en que mi imagen y la imagen de los míos pasea vuestras calles, no os quedéis con lo superfluo; no os quedéis sólo con esa imagen. Yo elegí, en los últimos días de mi estancia aquí, vivir una experiencia extrema para mostraros otra forma de verse, elegirse y vivirse.

 

Hay otra forma de vivir en el mundo. Una mente que no siente culpa, que sólo reconoce que es Inocente, Una en el Amor, sin diferencias con sus Hermanos, es una mente que está preparada para vivir sin dolor, sin sufrimiento, más allá de los límites del cuerpo, extendiéndose en el Amor que es.

 

Cuando veas mi imagen, estate alerta para que el dolor no te confunda; ni el castigo ni la culpa. Más bien trasciende, como yo así lo hice, la creencia de que eres un cuerpo.  Y ve más allá de esa imagen, incluso del espectáculo, a recordar que tú también puedes elegir tu Inocencia, tu identidad verdadera, y vivir con plenitud y abundancia, libertad y Amor, tu resurrección, cada instante de tu vida.

 

Elige de nuevo y elige bien, no te confundas ni confundas a tus Hermanos quedándote en el dolor.

 

Que mi imagen evoque tu unión íntima con el Amor que eres y que, desde ese Amor, elijas libremente ser feliz aquí y ahora.

 

Que así sea.

 

 

 

*Puedes conocer más acerca de nuestras formaciones online, diseñadas para el estudio de UCDM a tu ritmo, aquí.